Pase una noche en casa de Adri. Nos conocimos durante las celebraciones de año nuevo 09. Desde entonces nos hemos mantenido en contacto. Incluso planeamos viajar juntos a través de los Estados, México y Centro América, pero yo salí varios meses antes de que ella pisara tierras centroamericanas.
Salí de Toledo alrededor de las 9.30 de la mañana. Los CSers que me dieron jalón me advirtieron que el trecho era largo. Muy largo. Pasaron cerca de 4 horas antes de que necesitaramos combustible y fuera mi turno de manejar. Al (el dueño del carro) no quería cargar combustible en BP y le aplaudí su desición.
La última, o mejor dicho, la única vez que había estado en NY fue cuando aún era niño, tenía 9 tiernos y vivarachos añitos. Desde entonces, la ciudad debería haber cambiado “un poquito”?
No pude evitar sentir una tremenda emoción al ver la gran metropoli frente a mi. Es simplemente impresionante. La ciudad de Nueva York tiene más habitantes que la República de Guatemala!
Me quedé tres días en Smithtown, el pueblo en donde vive Al, porque Margarita me esperaba hasta el viernes. Yo llegué al estado de Nueva York el martes. Al estuvo de acuerdo en hospedarme dos días, por lo que tenía dos opciones: 1. Contactar a Margarita y preguntarle si era possible quedarme en su casa desde el jueves, o 2. Encontrar otro lugar en donde dormir una noche. Aunque, como no lograba contactar a Margarita, agregué otra opción: 3. Encontrar donde dormir y punto!
He conocido gente de CS desde que me involucré en el proyecto, en febrero 2008. Desde entonces, ha conocido solamente a muy buenas personas y al hospedar o viajar con ellas, gané grandes amigos. No tenía donde dormir la noche del jueves, por lo que entró en acción aquello de “conozco a alguien que conoce a alguien que conoce a alguien” blablabla. Corinne (CSer) es amiga de Megan (a ambas las conocí en octubre 2008, Megs no es CSer). Megan, conoce a Sami. Sami es el compañero de casa de Geo. Me quedé en casa de Geo y Sami una noche y ellos no tenían la menor idea de quien diablos era yo! Igual, me acogieron en su casa e, incluso, logré hacer un poquito de plata ayudando a Geo a vender discos en el metro! Por cierto, para cuando ya había hablado con Sami, Margarita me llamó para decirme que sí era posible que me quedara en su casa desde jueves.
Conocí lo que yo creo que es la cuna del capitalismo: Times Square. Es impresionante ver tanto rótulo, tanta iluminación, tanta gente poniendo su granite de arena para esa gran sociedad de consumo. Me imagino que la gente en los edificios de los alrededores nos miraban como hormigas moviéndose alocadas por un dulce tirade en el suelo. Pero bueno, ese lugar es parte de la ciudad y lo quería conocer. No compré nada, no hay nada por qué preocuparse.
Por la mañana, fuimos a explorer la ciudad. Compré una playera del Ché en Chinatown. Comí, espero que más limpias, las mismas nueces que Ben Stiller en “Along Came Polly”. Tomé una siesta en Central Park. Una larga siesta. Me enteré que los sábados es “pay as you wish” en el museo Guggenheim. Era algo que simplemente no podia dejar pasar! El museo es prácticamente gratis (pagué 1$ por entrar) de 17.45 a 19.45, todos los sábados. El museo es increíble! Pero, consejo: en tan poco tiempo, no es posible verlo todo, entonces, es mejor empezar desde el ultimo nivel e ir bajando porque empiezan a sacar a la gente que está arriba de primero. Nunca había estado en una iglesia tan grande como la Catedral de San Patricio sobre la 5 avenida. Es enorme. Encontré al bandera de Guatemala en el Rockefeller Center. Es la segunda vez que encuentro la bandera de mi Guate en los Estados Unidos. La primera fue en Chicago, junto a las del resto de países americanos. Esta vez, fue junto a las banderas del resto de países del mundo. En NYC hay “Little” lo que sea: Little Italy, Little India, Little Ukraine; The Village debería de ser Little Japan, porque el lugar esta lleno de sushi bars y de japoneses y japonecitas (ay caramba!).
Coney Island fue en su mejor época algo así como el lugar para ir a divertirse, más o menos como hace muchos años. Quizá ya no es el lugar que era antes, pero sigue siendo un bonito lugar para hacer un “day trip”. Ahí es donde hacen el concurso de quien es la persona que se come más hotdogs (solo podría pasar en los Estados). El record lo mantuvo un japonés por 5 años creo. Hay mucho juegos mecánicos de feria y un paseo por la playa (boardwalk). Un poco más al Este esta Brighton Beach, hogar del barrio ruso.
No todos tienen tiempo para pasear conmigo y el fin de semana se acabó. Entonces, el lunes tenía que explorer la ciudad solo. Pero, en su viaje a Guatemala, ayudé dándole información de Guatemala a una CSer de República Checa. No nos conocimos en esa ocasión, pero seguimos más o menos en contacto y resultó que coincidimos en la ciudad, al menos por unos días. Tenía un par de horas antes de juntarme con Radka y quería caminar por el Puente de Brooklyn. Ya tengo en mi haber el haber caminado por dos íconos del país: el Golden Gate Bridge y el Brooklyn Bridge. No se pueden comparer. Mientras que uno tiene alrededor un paisaje natural, el otro tiene un paisaje urbano. Vestía mi playera del Ché y me tome una foto en Wall Street haciendo la pose de la portada del disco de Rage Against The Machine “The Battle Of Los Angeles”. Fui objeto de algunas miradas raras, pero que me importa. Un grupo, no sé de que y no me importa, estaba regalanda barras de granola en cada esquina. Radka no quería las de ella. Llegué a tener casi una docena! Otro viajecito bonito, aunque sea solo de ida por venida, es el ferry a Staten Island. Lo mejor, es gratis! Y si cuentan con la “Metrocard”, pueden usar el Staten Island Railroad. Lo quizimos usar, pero se tardó mucho en salir y me desesperé. De regreso a Manahttan.
Me encantó el barrio ruso, no entendía ni mierda de lo que la gente hablaba pero es bien chilero. Aunque, algunas cosas son más caras que en otros lugares. La playera de la hoz y el martillo de la Unión Soviética costaba más del doble de lo que costaba en Chinatown. Por fin conocí el Flat Iron Building. Pasamos frente a el con Margarito cuando íbamos al Rockefeller Center, pero no lo pude apreciar bien.
El miércoles sería mi última noche en este continente por lo que decidí no salir. Quería ordenar y empacar mis cosas. Relajarme. Estaba muy ansioso. Al día siguiente cruzaría el Atlántico. Revisando mi email, alguien de CS postió que se iba a reunir con más gente de CS en un restaurante para comer. Le pregunté a Margarita si quería ir y dijo que si. Luego la gente se fue a tomar unas cervezas pero yo estaba cansado, además, quería descansar, al día siguiente me tenía que levantar temprano. Me dormí cerca de la 1 de la mañana y me desperté antes de las 6!
Salí del apartamento a las 8.30 de la mañana rumbo al aeropuerto JFK. Voy a citar a Nito: “pero que grande es esta mierda vos Nito!” Hay máquinas que despechan comida: chocolates, galletas, nachos, que sé yo. Pues bien, cerca de la puerta donde abordaría había una de esas máquinitas, pero esta despachaba Blackberries, iPods, iPhones, cámaras digitales, Nintendos, auriculares, etcetera.
Y llegó la hora de abordar el avión. Me espera un vuelo de 5+ horas hasta Islandia. Estoy algo nervioso: por el vuelo. Todos saben que me da miedo volar. Pero también porque he escuchado tanta historia de gente que no la dejan entrar a la Unión Europea. Que porque no tienen seguro, que se tiene que comprobar boleto de regreso. Creo que sabrán cómo me fue cuando lean desde dónde es mi siguente entrada.
Conclusiones:
Lugar más frío donde estuve: Lake Tahoe, CA/NV
Lugar más caliente donde estuve: Jacksonville, FL
Lugar donde estuve menos tiempo: Slidell, LA / Sylva, NC (1 noche) No estoy contando noches en aeropuertos.
Lugar donde estuve más tiempo: Jacksonville, FL
Lugar donde me puse la borrachera más gruesa: Jacksonville, FL
Lugar donde me puse la pedorrera más gruesa: Sylva, NC
Lugar que me gusto más: Lake Tahoe, CA/NV
Lugar que me gusto menos: Jackson, MS
Lo que más me gusto acerca de los Estados Unidos. Si, hay cosas que me gustan acerca de ese país, fue el compartir con amigos, que a pesar de la distancia, a pesar de los viajes, nunca perdimos contacto. Me hubiese gustado vistarlos a todos. Pero es un país muy grande y todos viven por todos lados! Amigos que me hicieron sentir como que estuviera en mi casa. Me hicieron sentir parte de su familia, me trataron como a uno más de la familia. No importa si los conocí el día anterior al quedarme con ellos o si los conocí hace dos años.
También me gustaron mucho las noches de cervezas a 1$ y las tiendas de 1$.
Nos vemos en Europa!!!